Estas historias son reales y tangibles, sus imágenes narran lugares, personas, ideas y sueños. Una mirada realista que nos ayuda a comprender dónde estamos y hacia dónde queremos y debemos ir.
Poder tener a mis hijos asistiendo a la escuela y con su alimentación asegurada es uno de los sueños que se me han cumplido gracias a la fundación Comparte Por Una Vida, Colombia.